
Etnia Barcelona presenta: La mirada anartista
The Legend of Leigh Bowery
Charles Atlas / Dinamarca, Francia, Reino Unido, Estados Unidos/ 2002 / 83 min.
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Bailarín, agitador, diseñador de moda, drag queen, modelo de excepción de Lucien Freud… resulta imposible definir con una palabra a Leigh Bowery, miembro VIP de ese club de excéntricos que hizo de los 80 una década tan loca como creativa.
Leigh Bowery tiene varias cosas en común con Andy Warhol, pero lo que más les une es que ambos hicieron de su vida una obra de arte. En el caso de Bowery, un australiano que aterrizó en el Londres de los 80 a tiempo para zambullirse de lleno en la escena de los ‘New Romantics’, su gusto por el artificio y su afición por el disfraz llevado al límite de lo políticamente correcto le convirtieron en alguien del que Boy George, Damien Hirst y Bella Freud hablan con cariño y admiración, cosa que no es nada fácil. Además de fundar el legendario club Taboo y de convertirse en el embajador de un peculiar tipo de glamour retorcido y, en ocasiones, monstruoso, Bowery acabó convirtiéndose en uno de los modelos favoritos del pintor inglés más influyente del siglo XX (con permiso de Francis Bacon), el maestro Lucien Freud, que curiosamente siempre le retrató desnudo, sin máscaras, maquillaje ni esos extravagantes trajes bajo los que se escondía su particular alienación.
