Estamos a principios de los noventa, y la fiesta ha terminado. La crisis económica, la Guerra del Golfo y la devastación causada por el VIH crean un ambiente sombrío e indócil. La ropa se deconstruye, se recicla, se cuestiona. Yohji Yamamoto, Martin Margiela, Ann Demeulemeester, Jil Sander o Helmut Lang protagonizan la última gran década de la moda.